El primer disco en solitario de un Beatles estuvo a cargo del más místico de ellos, aquí parte de su historia.

Los años sesentas fueron una época fértil para la búsqueda de experiencias nuevas, sean estas drogas, hippismo, «Jesus Freaks», familias Manson o el regocijo del encuentro fecundo de culturas deferentes. Muchos artistas  se inmiscuyeron en cultos que les eran ajenos a primera vista o en ideologías poco frecuentadas en occidente con el afán de aprender, complementarse o buscar trascender espiritualmente a aquellos placeres carnales que le ofrecía el mundo de las luces y el aplauso.

George Harrison fue indiscutidamente un inquieto espíritu en busca de verdades espirituales y conexiones con aquellos espacios que no siempre están disponibles en el fulgor del éxito. Su relación con la cultura oriental queda clara desde que conoció al Maharishi Mahesh Yogi y tras eso sus primeros acercamientos hacia los instrumentos indios, así como también hacia otra forma de pensamiento no convencional para el común de los habitantes del hemisferio occidental.

En 1968 y tras los primeros pasos espirituales de George en el hinduismo, el músico se abalanza con su primer disco solista, que a su vez es el primer álbum independiente de algunos de los 4 Beatles. Este disco se intitula Wonderwall Music y es además el primer álbum grabado por la disquera Apple de propiedad de los Beatles.

Wonderwall Music es la banda sonora de la película del mismo nombre dirigida por Joe Massot, el mismo que años más tarde dirigiría The song remind the same de Led Zeppelin. El álbum, subvalorado en sus años de lanzamiento y revalorado con los años, está conformado por un conjunto de fragmentos, en algunos casos altamente espirituales, en donde el sonido de los instrumentos indios nos hace navegar, en algunos casos por atmosferas oníricas y celestes, en otros nos trae de regreso a la tierra de manera radical con los sonidos occidentales y en otros utiliza mezclas de ambos ambientes para mantenernos habitando un limbo sonoro.

En un principio el mismo George Harrison aparece como productor del álbum sin incluirse en los créditos instrumentales del disco, sin embargo pasados los años nos enteramos por algunos instrumentistas que estuvieron presentes en las sesiones, que Harrison también estuvo a cargo de muchas de las partes musicales del LP. Para su conjunción pluricultural, George decide tener dos equipos de grabación, uno en Inglaterra en donde destacan la presencia de músicos como Eric Clapton o Peter Tork de The Monkees, registrados junto a otros en los estudios Abbey Road, mientas que un segundo grupo de interpretes serian registrados en los estudios de EMI Bombay, estos músicos eran maestros en la música clásica india y fueron seleccionados por George quienes en precarias condiciones técnicas realizaron sus registros. 

Podríamos decir que este álbum es una especie de hermano apartado de la discografía de The Beatles, epocal y ambientalmente conectado a Sargent Pepper´s y Magical Mistery Tour, vinculándose firmemente en la experimentación y la psicodelia.

Wonderwall Music es considerado por algunos como el primer álbum de World Music de la historia, subgénero del jazz en donde se reúnen los sonidos de culturas diversas del mundo con mezclas de sonidos occidentales.

Wonderwall Music es un viaje místico por una época,  un momento particular de uno de los Beatles más queridos en viaje por plena inquietud espiritual y musical y que vale la pena ser oído pues representa el final de un proceso de éxito como el de los cuatro de Liverpool, evidenciando el comienzo del fin de la agrupación más grande de la historia y  demostrando que cada uno de los cuatro genios deberían recorrer caminos distintos, los que les llevarían por separado y no tanto a diversos resultados sonoros.

Como dato curioso el tema de Oasis Wonderwall está inspirado en el nombre de este álbum.

A continuación te dejamos el disco Wonderwall Music de 1968 con 4 tracks inéditos incluidos en la remasterización de 2014.